¡¡YA TENEMOS CASA!!

Por fin lo logramos, después de 11 días buscando encontramos un cuarto en una casa con 4 habitaciones, 2 baños, 2 cocinas y 1 ducha. Es vieja con cojones y está completamente enmoquetada, aunque por lo menos no hay moqueta en el baño. ¡Aquí estamos esperando visitantes!

Después de firmar los "papeles" como que la habitación era para nosotros nos fuimos a ver unos partidos de deportes gaélicos: uno de hurling (aquí está explicado en inglés más completo) y uno de fútbol gaélico en el Croke Park (aquí más completo en inglés). El estadio nos queda al lado de nuestra nueva madriguera. La academia de inglés nos regaló las entradas y se suponía que era la final de algún campeonato, pero la realidad es que había más o menos 300 personas en todo el estadio (y caben 82500). Nos dijeron que el estadio sí se llena con los deportes gaélicos pero este campeonato era poco interesante.

El Croke Park tiene una historia curiosa, porque en él estaba prohibido jugar deportes no gaélicos, es decir, importados de Inglaterra, como el fútbol o el rugby. En Enero de 2006 se decidió por 227 votos contra 97 (11 votos más que los dos tercios necesarios) que se podía jugar el torneo 6 naciones de rugby ya que el otro estadio de la ciudad, donde solía jugarse este torneo, ha sido demolido y están construyendo uno nuevo. Parece ser que este año también se jugará aquí el torneo, así que a ver si conseguimos unas entradas para ver un Irlanda-Inglaterra.Por cierto, los deportes gaélicos son amateur, es decir, que los que los practican no ganan dinero. Los que destacan con el fútbol gaélico pueden irse a Australia a jugar al fútbol australiano que es muy parecido, aunque en Australia se juega con un balón como el del rugby y aquí con uno redondo.

Aquí va un video de fútbol gaélico.

y aquí uno de hurling. El hurling es más rápido y más difícil de seguir porque la pelota es muy pequeña. Eso sí, es espectacular y los palos con los que juegan son un arma letal cuando se enfadan unos con otros.

Un poco más de turismo

Ha'Penny Bridge (puente del medio penique) es un puente peatonal que está al lado de O'Connell Street y el Temple Bar. Si se anda por el centro se usa muy a menudo y muchas veces uno no se da cuenta de que esta usando un pequeño trocito de historia. Fue construido en 1816 y se cobraba medio penique por cruzarlo así que por eso, y porque tiene forma de moneda de medio penique, se llama como se llama.

Al lado del Spire esta la estatua de James Joyce. A veces se pone un mimo justo en frente disfrazado como si fuera la misma estatua y se queda quieto en la misma posición. Cuando alguien pasa distraído al lado suyo se mueve de repente y la gente se pega unos sustos bastante grandes (nadie espera que una estatua se mueva). Este hombre, James Joyce, es uno de los escritores más importantes de Irlanda y escribió una obra muy famosa, Ulysses, que es como el Quijote para los españoles, todo el mundo se siente mal por no haberlo leído. Hablando de escritores, aqué se venden camisetas con frases de otro famoso escritor irlandés, Oscar Wilde, que según se dice, era un cínico al que le gustaba mucho usar la ironía (y que estuvo en la cárcel por la comisión de actos homosexuales). Una frase de ejemplo: "Life is too important to be taken seriously" (la vida es demasiado importante como para tomarsela en serio). Hay una estatua de él en Merrion Square, la plaza donde están las famosas casas georgianas de las que hablaremos cuando tengamos fotos.

Y para acabar, una pinta a vuestra salud (sí, está tan buena como parece en la foto)

Bewley's Cafe

Por fin decidimos ver el capítulo de Planeta Finito de Dublín para ver si nos enseñaban más cosas que hacer y allí hablaban de este café: Bewley's Oriental Cafe, que esta en Grafton Street. Según decían, allí preparan el café irlandés como debe ser: Café caliente (espresso y americano), azúcar moreno, nata y whiskey irlandés. Nota histórica para demostrar que no solo nos lo bebemos, si no que también leemos: Este café no es originario de Irlanda, se inventó en USA en los años 50 y trataba de recrear la bebida que se les daba a los inmigrantes irlandeses para entrar en calor.

En resumen, alli nos fuimos, a bebernos un café irlandés en Irlanda. El sitio es muy bonito y el café está muy bueno, aunque si no te gusta el whiskey no es muy recomendable.


La otra delicia que probamos fue un "hot chocolate with marshmallows", chocolate caliente con unos dulces parecidos a las nubes (o jamones) de golosina que comemos en España, pero más pequeños y solamente de color blanco.

Desayuno irlandés

Acostumbrados como estamos a los desayunos españoles de leche con galletas fue realmente duro enfrentarse a uno típico irlandés. Con el hambre que llevas desde que te levantas hasta que llegas al bar parece que todo es poco, pero según vas comiendo te das cuenta de que no vas a poder desayunar tanto. Después de un buen rato, incluídos varios descansos, pudimos con todo, pero la verdad es que es el único dia que no echamos de menos el pinchito de tortilla de media mañana.

Lo que come Carmen es un wrap (rollito) que tiene salsa de tomate y todo lo que el plato de la foto anterior -menos las alubias- en cachitos pequeñitos. Los dos coindimos en el veredicto: Mejor el wrap. El desayuno no es la hora de comer alubias.

Costumbres irlandesas

Por ahora, lo poco que sabemos de la cultura irlandesa podríamos resumirlo en que aquí las cosas giran alrededor de la Guinness y los pubs. La foto anterior es de un sobre de salsa boloñesa precocinada de knorr y dice literalmente "hervir 500 ml (mas o menos una pinta)...". ¿Desde cuando se mide el agua para cocinar en pintas?. La explicacion mas racional a todo esto es que hace poco (en 2005) que usan el sistema métrico decimal en Irlanda, y para que la gente pueda saber cuanto son 500ml pues lo miden en pintas, no problem.

Otro ejemplo, ¿Cómo anuncian los irlandeses la copa del mundo de rugby de Francia? Pues llevando un pub en frente de la torre Eiffel, sencillo ¿no?

Temple Bar. Música en directo

El Temple Bar es la zona mas turística de Dublín. Está en pleno centro y, a diferencia de los barrios que la rodean, conserva el aspecto medieval original, con sus calles estrechas y empedradas.

Por el día la gente viene por aquí de compras, a comer y pasear un poquito. Y por la noche, a los pubs a beber. Pero lo que más nos ha sorprendido es la cantidad de espectáculos nocturnos que hay: mimos, antorchas humanas, un tío con una bicicleta que giraba al revés, y gente tocando todo tipo de instrumentos y música diferente. La gente se para a escucharles y se forman pequeños conciertos en plena calle en los que la gente participa. Dos notas: La policía les deja (no les echa) y los borrachos les respetan. No me puedo imaginar un mimo en la calle varillas en Salamanca sin que una panda de malotes le jodan el espectáculo. Que le vamos a hacer.
Grabamos a unos cuantos que nos parecieron buenos pero buscando en youtube encontramos a un abuelete que toca una especie de bandurria y que anda todas las noches aquí. Hemos elegido a este en concreto porque estando en una fiesta en la casa de una brasileña de la academia apareció por allí, nadie le conocía, pero allí estaba, en el salón con todos nosotros. Estan locos estos irlandeses.

De turismo

La llegada a Dublín fue dura, así que al día siguiente decidimos darnos un pequeño descanso antes de ponernos a buscar piso, y recorrimos el centro de Dublin como dos turistas. Una visita al "maravilloso" Spire, que para el que no sepa inglés y no pueda leer la wikipedia, es un palo gris de 120 metros plantado en la mitad de la calle mas céntrica de Dublín: O'Conell Street. Lo pusieron allí para sustituir el monumento a Nelson. Este hombre, Nelson, fue un noble, marino y militar británico, almirante de la Marina Real Británica y uno de los marinos más célebres de la historia. Al IRA no le gustaba tener un monumento a un inglés en el mismo centro de la capital de Irlanda, así que le puso una bomba y adiós a Nelson, ¡hola Spire!

Hay mucho Dublín que ver (y muchas fotos) pero allá va una de un típico irlandés de piel rosita. Este señor vigila el aparcamiento del Banco de Irlanda que está en frente del Trinity College. Aunque tenga esa pinta, no parecía estar borracho, pero eso de un irlandés nunca se sabe.

Y una cosa está clara, un turista no puede acabar una visita a Dublín sin beberse una pinta de Guinness en algun pub del Temple Bar rodeado de españoles, italianos y brasileños. Un aviso para visitantes, aquí los pubs los cierran a las 12 y los viernes y sábados a la 12.30, pero no como en España que se da el aviso de cerrar a las 4 y hasta las 5.30 no se desaloja el local, aquí se da el aviso a las 12 y te van echando, literalmente hasta que a las 12.30 no queda nadie dentro. Si a alguien le queda fiesta en el cuerpo siempre se puede ir a una discoteca, nosotros no hemos ido nunca. Es un poco extraño, pero la solucion para que la noche de un poco de sí es salir a las 8, como cuando teniamos 14, un regreso a la infancia....

El alunizaje

Aunque ha pasado casi un mes desde que llegamos a Irlanda, este es el primer post de un -esperemos- largo blog. Como en todas las historias habrá que empezar desde el principio: el viaje. Después de meses esperando, llegó el día. Cogimos nuestro equipaje, los billetes y con los cojones a la altura de la garganta dimos comienzo a la aventura. Rumbo a Irlanda.....

No hay fotos de Dublín en el día del alunizaje pero esta es de la espera en el aeropuerto de Barajas. El mundo es un pañuelo....